El turismo contribuye directamente al 14% del PIB y emplea al 8% de la población. Sin embargo, la huella sobre el medioambiente pone en riesgo los frágiles ecosistemas de la costa y el país sigue siendo uno de los principales destinos mundiales del turismo sexual. La OMT define el turismo sexual como "viajes organizados por el sector turístico, o utilizando sus estructuras y redes, con el propósito principal por parte de los turistas de mantener relaciones sexuales a cambio de dinero, o equivalentes, con los residentes en el destino.
Desde hace más de una década el gobierno tailandés y los operadores privados promocionan el ecoturismo y el turismo basado en la comunidad (CBT, por sus siglas en inglés) por ser una alternativa sostenible al turismo convencional.
El precio por una relación sexual en uno de los establecimientos de la Walking Street ronda los 1500 Bath (40€), mientras que el salario mensual de un trabajador de la hostelería va de los 10 mil a los 15 mil Bath (260/390€).
Se estima que en Tailandia hay almenos 60.000 menores de 18 años obligados a prostituirse. El rango de edad más común para las niñas víctimas de la trata tiende a ser entre 12 y 16 años. Los depredadores sexuales acceden a los niños y niñas más vulnerables a través de las redes de prostitución en bares, locales de karaoke, salones de masaje y burdeles. Sin embargo, en los últimos años se han multiplicados los casos de abusos por parte de personas que participaban en programas de cooperación o voluntariado. Además, muchos de ellos recopilan imágenes de abusos sexuales a niños y lo comparten a través de internet, engrosando así los canales de la pedopornografía online.
La lista de las nacionalidades de los abusadors tiende a reflejar la de los países emisores de turistas, con a la cabeza Japón, China, Taiwán, Singapur, Malasia, Hong Kong, Corea del Sur, Australia, los EE.UU., el Reino Unido y otros países europeos. En 2013 Tailandia negó la entrada a un total de 79 conocidos abusadores sexuales infantiles extranjeros. El país fue clasificado como el tercer destino más visitado por los abusadores sexuales australianos.
El gobierno desarrolla desde hace algunos años con las ONG y la industria hotelera vario programas de formación profesional y empleo para los jóvenes en situación de riesgo. UNICEF y la Universidad Payap han desarrollado un Centro de Asistencia Legal, para ayudar a los residentes sin documentos, en particular niños y jóvenes del norte del país, a acceder a la nacionalidad tailandesa y mejorar su situación jurídica, con el fin de reducir su vulnerabilidad. Además, han sido activadas varias líneas directas de 24 horas, gestionadas por la División contra la Trata de Personas de la Policía Real de Tailandia y por el Ministerio de Desarrollo Social y Seguridad Humana, para denunciar episodios de violencia y abuso , la explotación sexual y la trata de seres humanos. Sin embargo, el servicio está disponible sólo en tailandés, excluyendo a una serie de grupos vulnerables.
El CBT está planificado y gestionado por la población local y las actividades están dirigidas por guías de la comunidad. Los programas también están diseñados para apoyar proyectos sociales y medioambientales y para distribuir las oportunidades de manera justa. También en el caso de partnership con el sector privado los miembros de la comunidad retienen competencias para la toma de decisiones y son capaces de guiar la dirección del desarrollo del turismo en su pueblo.
Los objetivos principales del programa CBT son: el desarrollo de recursos humanos y la participación comunitaria; la habilitación de las culturas locales y las formas de vida tradicionales; la conservación de los recursos naturales; el intercambio cultural entre anfitriones y visitantes; el aumento de los ingresos de los miembros de la comunidad.
Gracias al CBT la población de Ban Ja Bo ha podido recuperar algunos de los elementos propios de su cultura, como la música y las artes marciales. Las políticas gubernamentales, en el pasado, habían dificultado el reconocimiento y la puesta en valor de las minorías en Tailandia. En los últimos años, en cambio, se está aprovechando el potencial del turismo de comunidad en estas zonas como modelo alternativo y más sostenible.
Gracias al CBT las familias de Ban Ja Bo han mejorado sus ingresos. En general, los que participan en el programa destinan al club un 10% de lo que ganan, que sirve como caja común para mejorar las infraestructuras (baños, desagües, recogida de basura, etc.) para toda la comunidad. Las tarifas que pagan los visitantes son muy bajas, comparadas con las del mercado (dormir y comer cuesta unos 300 Bath por día, unos 8 euros). Sin embargo, estos ingresos extra les permiten mejorar la calidad de vida y comprar objetos que no estaban a su alcance.
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Ideación, producción y edición periodística:
Angelo Attanasio
Fotos, vídeos y vídeos 360º:
Edu Ponces/RUIDO Photo (Tailandia), Toni Arnau/RUIDO Photo (Zanzibar), Pau Coll/RUIDO Photo (República Dominicana)
Edición fotos:
RUIDO Photo
Textos y entrevistas:
Angelo Attanasio
Edición vídeos y vídeo-entrevistas:
Angelo Attanasio, Anna Achón
Edición vídeos 360º:
Toni Arnau/RUIDO Photo
Diseño arquitectura interactiva y gamificación:
Eva Domínguez
Asesoría científica en ámbito turístico:
Antonio Paolo Russo
Definición, diseño creativo y desarrollo:
Música y Efectos sonoros:
Music Library & Sounds FX, Banco de sonidos
Temas musicales:
“Indonesian Story”, Christophe Goze; “Cape Town Hoedown”, Sonia Slany/Paul Clarvis; “Viva Latina 2”, Barrie Gledden/Chris Bussey
Realización en colaboración con los profesores y las alumnas del curso “Nuevas Narrativas: Documental Interactivo y Transmedia”, organizado por:
DOCS Barcelona School
Joan Gonzàlez (Director), Arnau Gifreu (coordinador); Cynthia Rodríguez, Lucia Sances, Júlia Canosa Serra, Marisa Lafuente.
Agradecimientos:
Alba Solé Borrull, Chootima Longjit, Aino Tanhua & Khamis Rashid (Colors of Zanzibar), Michela Izzo, María Cilleros, Juan Luis Sánchez, Esther Alonso, Arturo Olea, Alberto Macchioni, Yago Santos, Stefan Gössling, ECPAT International.
Si quieres conocer más sobre las fuentes y la biografía usada para este trabajo, pincha aquí.
Proyecto realizado con ayuda del
European Journalism Centre and the Innovation in Development Reporting Grant Programme.